publicat per
http://butaquesisomnis.blogspot.com.es
Por Elisa Díez (Butaques i Somnis)
Entre el "que les den!" de Blanca Portillo y la
"botifarra" (corte de mangas) de Rosa Mª Sardà hay un 21% de IVA
("cultural") que marcó las reivindicaciones de la noche. Fuera de
exabruptos, la velada transcurrió como siempre, muchos premios para los
montajes de Madrid y escasos para los de Barcelona. El Rey gana al príncipe y
el que parte y reparte se queda con la mejor parte.
No sé si son merecidos o no, no he visto ninguno de los
montajes premiados, y mucho me temo que no lo veré. A Barcelona llegan con
cuenta gotas los montajes de fuera, y los que llegan tienen una estrella
mediática en cartel. Sea como fuere el teatro catalán se quedó relegado al
mejor actor, Lluís Homar por Terra Baixa (en una categoría donde solo competían
catalanes), la mejor adaptación (Anna Maria Ricart por Fuenteovejuna), el mejor
espectáculo musical, l'Eclipsi del TNC/Festival Grec y el premio Max de Honor
para Rosa Mª Sardà.
Se fueron con las manos vacías: Gemma Brió, Oriol Broggi, El
President, Pau Miró, Carme Portacelli... aunque como bien dijo Blanca Portillo
en su discurso al recoger el Max a la mejor actriz protagonista por El
Testamento de María lo importante es el público, los que llenan las salas a
pesar del número 21.
La gala mejor que la del año pasado, no era difícil, el año
pasado casi nos cortamos las venas, pero con un cierto regusto a gala rancia
made in Jose Luis Moreno, que parece que el teatro, el cine y demás galas
culturales no se quita de encima. Es lo que toca.
De sequía de premios para los candidatos catalanes, hubo
olvidos y alguna otra cosa que me cuesta de entender. La recientemente
fallecida Rosa Novell nominada a mejor actriz de reparto, claramente ganadora a
los ojos de muchos, un homenaje ya que estábamos homenajeando a las actrices de
siempre y maestras de teatro, pero no. Me parece de un mal gusto supino,
nominarla y no dárselo. Lo siento, pero no lo entiendo. Como tampoco entiendo
el olvido de Blanca Portillo en tantos agradecimientos y que no se acordará de
ella.
Más cosas de mal gusto, en el momento de recordar a los que
nos han abandonado este año, se pasaron sus nombres simplemente en la pantalla
mientras unos cantaban, otros bailaban y el resto aplaudían. Sólo nombres,
nadie les quiso poner cara, de vergüenza.
La mejor noticia de la noche fue ver sobre el escenario a
Rosana Torres, una de las mejores cronistas culturales. En silla de ruedas pero
muy lúcida, agradeció con una cierta vergüenza los aplausos. Sinceros, como sus
crónicas para el diario El País, un regalo para muchos.
El Paral·lel se llenó de VIPs, algunas estrellas, otros
estrellados, muchos curiosos, pero más de lo de siempre. Los Premios Max
quieren aglutinar a un sector muy diverso, que como bien alguien reivindicó en
uno de sus discursos, no todos pertenecen a la SGAE, por lo tanto no son todos
los que deberían ser, sino los que alguien quiere que sean.
Premios Max 2015
Max de honor. Rosa María Sardà.
A la contribución a las artes escénicas. Bienal de Flamenco
de Sevilla.
Espectáculo de teatro. Cuando deje de llover.
Espectáculo de danza. Free fall. Compañía Sharon Fridman.
Espectáculo musical. L' Eclipsi.Grec 2014. Teatre Nacional
de Catalunya.
Espectáculo revelación. Los nadadores nocturnos. Draft.inn.
Espectáculo infantil o familiar. Dot. Maduixa Teatre.
Dirección de escena. Julián Fuentes Reta por Cuando deje de
llover.
Actriz protagonista. Blanca Portillo por El testamento de
María
Actor protagonista. Lluís Homar por Terra baixa.
Bailarina principal. Olga Pericet por Pisadas.
Bailarín principal. Israel Galván por Fla.co.men.
Autoría teatral. Laila Ripoll/ Mariano Llorente por El
triángulo azul.
Coreografía. Rocío Molina por Bosque Ardora.
Actriz de reparto. Susi Sánchez por Cuando deje de llover
Actor de reparto. Pepón Nieto por El eunuco.
Diseño de iluminación. Juan Gómez-Cornejo por Fausto
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada