publicat per
Miguel Gabaldón
22.10.14
Teatro Bo Devil. Madrid
Unos camareros siniestros, chic y eróticamente pálidos,
acompañan uno a uno a sus asientos, como si de invitados VIP se tratase, a los
espectadores de esta cena de excepción. Los ibéricos sobre pan de cristal y
salmorejo de cereza te dan la bienvenida junto a la maestra de ceremonias y su
enjambre de malditos. La ensalada de sardina ahumada con tomate cherry
confitado y escalibada acompaña la música y los movimientos de los acróbatas.
Luego seguirán el tataki de atún rojo o la arepa de ropa vieja cubana. Ocho
platos que ilustran gustativamente el vodevil que recrea La cena de los
malditos, un espectáculo que está llamado a ser una de las propuestas de fusión
más completas y darks de las noches de la capital.
Mix de burlesque, cena degustación, club privado, fiesta de
Halloween, musical y espectáculo acrobático, este Madrid extraordinary dinner
show, como lo denominan sus creadores, la verdad es que no descubre el Nuevo
Mundo pero sí que deja un sabor de boca más que bueno (en todos los sentidos).
Una propuesta que sigue un poco la estela de The Hole, en versión tal vez menos
chabacana y más oscura. Puede ser que menos divertida, pero más elegante. Un
ágape perfecto para llenar estómago y sentidos a la par.
Entre el Paseo de la Castellana y Bravo Murillo, en una de
las zonas de residencia del que en sus tiempos era el aparato militar del
Régimen, la autodenominada Federación de Amigos de la Enseñanza levantó un
teatro que ahora los responsables de Fuse People, empresa especializada en
gestión de espacios de ocio y gastronomía, ha transformado en el Teatro Bo
Devil, un lugar que a través de los años por lo visto ha sido testigo de
numerosas mutaciones y que ahora presenta un ambiente sin duda especial y
bastante único. Un universo elegante y canalla donde el tiempo se ha detenido y
habitan estos condenados a la farra eterna.
Marta Gutiérrez es la directora y responsable del libreto.
La verdad es la historia (típica crónica de búsqueda de amor eterno contra
viento y marea, etc, etc, etc) es lo de menos en un espectáculo que pone todos
sus esfuerzos al servicio de hacer pasar una noche agradable al respetable. La
narración está trufada de canciones conocidas y acrobacias aquí y allá. Las voces
(de todos y cada uno de los intérpretes) son mucho más que notables. Los
números acrobáticos, elegantes y bien ejecutados. Con una especial inclinación
a los aéreos, que siempre funcionan y resultan vistosos. No hay un pecho fuera,
pero contiene su carga de erotismo interesante, lo que se agradece en estos
tiempos de nudismo escénico sin ton ni son. Las risas, ni muchas ni pocas, en
su punto justo. Igual que la comida, servida por unos amables camareros (que
parece que no, pero es muy importante para completar la ecuación) aparte de los
propios miembros del elenco. Una atmósfera oscura e íntima proporciona el
ambiente perfecto con el objetivo de “regalarnos una noche de magia y sacarnos
por unas horas de nuestras pequeñas existencias”, como diría Madame Dissolue.
Esta Mme. Dissolue es una anfitriona encarnada con pasión
por una estupenda Beatriz Ros (entregada en un cien por cien a su papel, da
gusto verla). A su lado algunas caras conocidas como Adam Jezierski (famoso por
Física o Química y que ha demostrado su valía en teatro en El cojo de
Inishmaan) como Notario o Angy Fernández (que la chica la verdad es que para un
cuerpo tan chiquitico vaya voz tiene) como la amada de Gabriel (interpretado
por el cantante Litus). Arropados por unos acompañantes (bailarines, cantantes
y acróbatas) de lujo con talento, actitud y muchísimo rollo. El espectáculo
permite tranquilamente poder disfrutar de la cena de forma pausada (con algunos
descansos mientras la orquesta deja caer desde las alturas música ambiental) y
la interacción con el público está cocinada al punto, perfecta para dar vidilla
sin llegar a resultar molesta ni intrusiva.
Así la noche en Bo Devil fluye, proporcionando una velada
más que agradable. La cena de los malditos es un una propuesta bien pensada,
bien montada y con vistas de negocio y futuro en las noches de la capital. Si
uno se quiere dar un capricho e invitar por ejemplo a su churri a una cena que
se salga de lo habitual, ente romántica y siniestra, desde luego ésta es una
buena opción. Sobre todo ahora que Halloween está a la vuelta de la esquina y
la gente se siente un poco más oscurita de lo habitual. La verdad es que al
final a uno le entran ganas de convertirse en uno de ellos y ser un maldito. Si
no para toda la eternidad, sí al menos por una noche...
+ info
Nombre del montaje: La cena de los Malditos
Disciplina: Musical
Director: Marta Gutiérrez
Autor: Marta Gutiérrez
Reparto: Beatriz Ros, Litus, Adam Jezierski, Angy
Fernández...
Productor: Víctor Fernández
Dónde: Teatro Bo Devil
Dirección: General Orgaz, 17. Madrid
Hasta: 29.11Horario: Miércoles y Jueves a las 21.30h.
Viernes y sábados a las 22 h.
Precio: De 20 a 70 €
Venta de entradas: www.entradas.com
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada